Hace unos días la Coalición por el Cambio resolvió su pacto municipal.
En cuanto a nuestra comuna de Galvarino se estableció que el candidato al
municipio lo propondría la UDI.Yo acepté la proposición que me hicieran, y soy
la candidata a alcaldesa. La gente se me acerca para dos cosas. Por un lado, a
felicitarme. Por el otro, para preguntarme las razones que me hicieron aceptar
este reto. Las felicitaciones las agradezco mucho. Aunque, más en serio que en
broma, es mejor dejarlas para el horario posterior al cierre de la oficina. En
cuanto a las razones que me llevaron a aceptar, son muchas. Pero
para empezar, hablaré respecto a tres de ellas que creo que son muy
importantes. Primero: después de 28 años en el servicio público, me siento
perfectamente capacitada para ejercer el cargo alcaldicio, que tiene muchas
complicaciones legales y administrativas que para mí son asunto conocido, por
lo que la comuna tendría la garantía de que desde la alcaldía no se cometerá
esa clase de errores.
Tercero: en cuanto a los temas más importantes, no hay duda de que son
la educación (gravemente deficitaria pero mostrando algunas mejoras importantes
en otras áreas); la salud (y la relación con el hospital de Galvarino como
principal centro de la comuna); la mantención de la red de caminos rurales; la
capacitación productiva de los campesinos, por el Prodesal y el PDTI; la
aplicación de la nueva ficha de protección social; la vivienda y el consecuente
crecimiento de la ciudad; la escasa práctica deportiva; la presentación de
proyectos, entre otros.
Mireya Castel